Tinaja Aragonesa

Extraordinaria tinaja de barro cocido procedente del entorno rural aragonés, probablemente del Bajo Aragón o la provincia de Teruel, datada a finales del siglo XIX. Esta pieza singular no solo destaca por su rotunda belleza formal y su pátina terrosa natural, sino también por la emocionante historia que lleva impresa en su cuerpo: una antigua reparación realizada con grapas metálicas, testimonio vivo de una época en que los objetos no se desechaban, sino que se cuidaban y reparaban.

El “cosido” artesanal, visible en el tercio superior, se aplicaba para alargar la vida útil de tinajas muy valoradas, convirtiendo la función en estética. Su silueta troncocónica de líneas austeras y proporciones sobrias la convierte en una escultura cerámica que trasciende su uso original.

Ideal como pieza decorativa en espacios que aprecian lo auténtico, lo imperfecto y lo lleno de alma: del wabi-sabi contemporáneo a interiores rústicos o mediterráneos con carácter.

• Alto: 43.5cm
• Ancho máximo: 36cm
• Diámetro de la boca: 20cm